A la hora de proteger la vivienda, además de los consejos básicos, existen pequeños trucos para hacer del hogar un espacio más seguro, que suponen una alternativa muy interesante frente a los altos costes que suponen los sistemas profesionales de seguridad

 

1. Cerrojos en las ventanas: si las ventanas son de guillotina o se deslizan de forma horizontal, se pueden usar elementos (una simple barra de metal o madera) que actúen como topes en el riel y evitar así que se deslicen y abran con facilidad. Otra opción es hacer un agujero en el marco de la ventana con un pequeño taladro para colocar en él un tornillo largo que haga de tope.

2. Persianas: la seguridad que ofrecen las persianas no es equivalente a la de unas rejas. Además de ser más estéticas son una buena alternativa y ofrecen un nivel de protección extra a la ventana.

3. Bisagras con fijador en puertas y ventanas: de esta manera se evitará que las unas o las otras sean forzadas.

4. Alarmas SIN CUOTAS: frente a las altas cuotas mensuales de las alarmas conectadas a C.R.A. (Central Receptora de Alarmas), existe la posibilidad de instalar una alarma sin cuotas con aviso al smartphone del propietario en caso de intrusión. Es un sistema muy económico y efectivo.

5. Temporizadores o simuladores de presencia: una sensacional opción para aparentar que la vivienda se encuentra ocupada, con un gran poder de disuasión.

6. Una buena iluminación: una de medidas más económicas y efectivas para disuadir a los ladrones tal y como indican la estadísticas. En exteriores, se puede optar por utilizar reflectores y/o antorchas solares. Los focos con detección de movimiento resultarán muy efectivos para ahuyentar a los posibles intrusos.

7. Cerraduras “invisibles” en las puertas: existen cerraduras que se instalan en el interior de la puerta y no son visibles desde el exterior, por lo que resultan imposibles de forzar. Se abren a través de un mando por lo que resultan realmente prácticas.

8. Objetos “antitrepa” en los muros o vallas exteriores: colocar elementos punzantes en la parte superior de los muros evitará que se puedan escalar con facilidad.
El objetivo de todos los ladrones es acceder a la vivienda de la forma más “natural” y discreta posible, de manera rápida y silenciosa. Por eso, todo aquello que suponga alertar a los vecinos o demorar el tiempo de acceso será un eficaz elemento disuasorio. Un pequeño detalle, como el tipo de cerradura, marca la decisión de los intrusos de robar una vivienda u otra.

 

Artículo de Juan Antonio Diaz Humanes, Responsable de Marketing y Comunicación dePrevent Security Systems.